Cualquiera
que sea la acción que realice Israel contra las instalaciones
nucleares iraníes, llevará a la aniquilación inmediata del país hebreo. Así lo
ha declarado el ministro de Defensa de Irán, Ahmad Vahidi, exacerbando de esta
manera la tensión entre ambas naciones. “Cualquier paso por parte del régimen
sionista israelí acarreará la destrucción del país. Los guerreros de
Irán están listos y dispuestos a borrar a Israel del mapa”, advirtió, preocupado por las crecientes especulaciones sobre un posible ataque
contra las instalaciones nucleares de la República Islámica.
El movimiento Hezbollah, por su parte,
echó más leña al fuego, añadiendo que “se encuentra a la vanguardia de
la lucha contra Israel y que se está haciendo más fuerte día tras día”.
En el marco de la ceremonia en honor a
los comandantes fallecidos de Hezbollah, Vahidi puntualizó que “Israel
es más débil que nunca y que su Ejército está cansado y humillado, por
lo que busca resolver sus problemas amenazando a Irán”. “No obstante,
se trata de declaraciones ridículas”, agregó el político iraní.
Mientras que Israel no para de emitir
amenazas sobre un ataque militar contra las instalaciones nucleares
iraníes -que, según Teherán, están destinadas a fines pacíficos de
generación eléctrica- los medios de comunicación israelíes advierten de
que la incertidumbre en el Estado hebreo ha aumentado de una manera
radical.
El reciente viaje fallido de una
delegación del organismo regulador de la energía atómica de la ONU
(OIEA) a Teherán y el rechazo de sus autoridades a admitir a los
inspectores internacionales en la planta secreta de Parchín evidencian, a
juicio de Israel, la realidad del peligro de los proyectos energéticos
de Irán.
Las ambiciones iraníes también generan
temores entre los aliados norteamericanos en el Golfo Pérsico, donde EE.
UU. está reforzando sus posiciones marítimas y terrestres para afrontar
un posible cierre del Estrecho de Ormuz por parte de Irán.
No hay comentarios:
Publicar un comentario