Para algunos se trata de “la marca de la
bestia”; para otros, es parte del plan mundial de dominación que
incluye el “chipeado” de todos los seres humanos.
Otros sugieren que los
chips son una cuestión de seguridad. Lo cierto es que día a día hay más
muestras de que los chips de control se hacen presentes, como en
Venezuela, México, España, USA…
Uno de los distritos escolares más grandes en Texas ha comenzado a
utilizar la tecnología de seguimiento por radiofrecuencia, o RFID, con
sus estudiantes.
Según los administradores de Northside Independent School District es una “gran manera de mantener a los niños seguros”. Sin embargo, algunos padres dicen que es una invasión de la privacidad de los niños y que viola sus creencias.
La escuela John Jay High School requiere la tarjeta para sus actividades como la compra de comida o buscar un libro de la biblioteca.
La escuela John Jay High School requiere la tarjeta para sus actividades como la compra de comida o buscar un libro de la biblioteca.
El día de Andrea Hernández comienza con su mochila,
una camiseta, y su tarjeta de ID de estudiante. Pero en la escuela John
Jay High School esta estudiante de segundo año no está utilizando su
nueva insignia de su escuela con el RFID. Ella está usando la tarjeta
del año pasado. Hernández dice que el nuevo ID viola sus creencias religiosas. Ella
cree, y con sólidas razones, que el RFID condiciona a los estudiantes
para algún día aceptar lo que el libro bíblico de Apocalipsis denomina “marca de la bestia.”
“Esta no es la gran economía como la economía de USA o la economía de Texas”, dijo Hernández. “Es la economía de la escuela John Jay High School, donde no estás autorizado a participar en ella a menos que tenga esta cosa.”
Pero Northside dice que las insignias “ayudarán a mantener a los niños seguros” y, con 100.000 estudiantes en mega-escuelas de la ciudad, es una tarea difícil.
Los estudiantes deben llevar dispositivos RFID en cordones alrededor
del cuello. Los RFID contienen pequeñas baterías que emiten ondas de
radio. Escáneres RFID incrustadas en el techo luego “leen” las insignias
en varios lugares alrededor de la escuela e identifican la ubicación de
los estudiantes.
El portavoz de Northside, Pascual González dijo que el nuevo sistema ayudará a las escuelas a realizar un seguimiento de los estudiantes “donde quiera que se encuentren”. Ahora se puede identificar la ubicación de un estudiante en el momento. Muchos padres apoyan el sistema, diciendo que les da la “tranquilidad”.
“Como padre, quiero saber dónde está mi hijo porque estoy haciéndolos responsables por su bienestar”, dijo Madelene Garza.
Pero no todos los padres están de acuerdo. “No me gusta la idea de tener a los chicos con un chip”, dijo Bobby Scott, quien tiene tres hijos en el distrito.Leticia Adams, otro apoderado, asegura que: “Yo creo que esto es invadir la privacidad de nuestros hijos y de las libertades civiles y no hay elección si optar o no”, dijo.
Organizaciones de Privacidad de USA están apoyando estos padres. “La preocupación principal es que no queremos que se convierta en una sociedad vigilada”, dijo Jay Stanley, analista de políticas de la American Civil Liberty Union’s Speech.
“En nuestra cultura y nuestras tradiciones jurídicas, el gobierno no te vigila a menos que tenga una razón de peso para sospechar que usted está involucrado en actos ilícitos“, dijo. “Este tipo de tecnología implica la libertad de expresión, el derecho a las libertades de asociación y la libertad religiosa”.
“Imagine por ejemplo que un estudiante sea disuadido de asistir a un grupo de interés político porque teme que la tecnología de seguimiento alertará a los administradores, directores u otros acerca de sus intereses políticos”, dijo Khaliah Barnes, de EPIC (Open Government Fellow at Electronic Privacy Information Center)
Los peligros reales que encierra el “chipeo” de las personas tienen
que ver con su propia libertad, llevando el debate a una cuestión en la
que las personas deben elegir entre su propia libertad y su seguridad.
El razonamiento toca un punto que vale la pena observar: el ejercicio de
la propia libertad implica necesariamente riesgo, es decir, la
posibilidad de perder seguridad y control sobre las situaciones.
Así, si
el ejercicio del libre albedrío implica necesariamente inseguridad, la
instalación del chip implica necesariamente ceder la propia libertad.
El
encontronazo entre esas la idea de seguridad y libertad es clave en el
debate y probablemente será el eje en el que se moverán las decisiones
de las personas en el eventual caso de que estos chips comiencen a ser
instalados bajo la piel de las personas, como plantean los
conspiracionistas.
[F] urgente24.com/
Tambien podrian extirpar un ojo de cada niño i ponerles una cámara de TV y así los niños tendran mas seguridad, no solo sabremos donde estan sinó que sabremos que estan haciendo en todo momento...no te jode?
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